martes, 30 de octubre de 2012

GALICIA CANIBAL



No hay quinto malo para el Real Madrid de Pablo Laso, único equipo en liza que mantiene la noble condición de invicto tras disputarse las cinco primeras jornadas de la actual edición de la Liga Endesa. Mucho sufrimiento y una prórroga ante un Caja Laboral que demuestra seguir siendo el equipo ultra-competitivo de siempre. Acudían los de Ivanovic a Madrid con las bajas de Andres Nocioni y Taylor Rochestie, además de los recientes problemas físicos del pívot alemán Tibor Pleiss quien aún está lejos de su forma ideal. Como si de una prolongación de las extraordinarias semifinales por el título que nos brindaron ambos equipos la pasada temporada se tratara, tanto unos como otros ofrecieron al espectador una enconada lucha por la victoria nada exenta de calidad. El Madrid fue más constante en su idea de establecer un ritmo alto y atacar la defensa baskonista a base de verticalidad, y a raiz de ello los de Laso mandaron en el luminoso durante gran parte del partido. Pero los de Dusko no se vinieron abajo en ningún momento y la calidad y polivalencia de Nemanja Bjelica, junto al liderazgo y corazón de Fernando San Emeterio mantuvieron a flote a los alaveses, a quienes en el tramo final se unió un Maciej Lampe en su mejor versión para llevar el partido a un tiempo extra que dotó al duelo de un mayor empaque. Aún así la sensación era de que el Madrid había regalado esa prórroga, por lo que una vez en ella otro arreón blanco parecía poner el partido en franquicia para los de la capital (80-74), hasta que apareció nuevamente Lampe quien con 5 puntos consecutivos volvió a poner el choque en un pañuelo y Nemanja Bjelica remató poniendo a los de Ivanovic por delante (80-81) Una absurda perdida de Heurtel dejaba prácticamente la última posesión a un Real Madrid que no falló con Mirotic sentenciando por dentro. Aún así el Caja Laboral tuvo la última ocasión de, primero ganar por medio del intento triple de San Emeterio, o posteriormente alcanzar una segunda prórroga con los dos rebotes ofensivos de un inconmensurable Nemanja Bjelica. Bellísimo choque para cerrar la jornada en el que cualquiera de los dos equipos pudo ganar, y el Caja Laboral, pese a verse ya dos victorias por debajo del liderato, sale muy reforzado de cara a sus opciones de pelear por las competiciones domésticas.  


Nikola machaca para acabar con las opciones de un gran Caja Laboral


En efecto, el Real Madrid ya disfruta de su liderato e imbatibilidad en solitario, y desde lo alto de la tabla mira la distancia obtenido con el resto de los equipos fuertes de la competición. Unicaja, Valencia y Bilbao a una victoria, Barcelona y Caja Laboral a dos. No es para nada mal botín en tan sólo cinco jornadas de liga. Si el equipo de Laso es el único invicto es gracias a la derrota de quienes llegaban a esta jornada acompañándoles en tal condición. La jornada se abría el sábado en el Palacio de los Deportes de Madrid con un vibrante Asefa Estudiantes-Valencia Basket del cual los telespectadores no pudieron disfrutar de la primera parte, por culpa del omnipresente tenis que parece ocupar las 24 horas del día la programación de Teledeporte hasta el hartazgo. Ya no hay duda con los de Vidorreta, van en serio, muy en serio. La columna vertebral es clara: Granger-English-Kirksay-Gabriel-Barnes, con un Jaime Fernández cada vez creciendo más, la explosión de "la araña" Lucas Nogueira, el recuperado Daniel Clark, la experiencia de Josh Fisher, y claro, Kyle Kuric, la rotación de Vidorreta llega hasta poder contar con diez jugadores sin que haya un notable resentimiento en la productividad del quinteto en pista. El caso del escolta norteamericano es sintomático respecto al cambio respecto a la pasada temporada. Un tipo y perfil de jugador que el curso pasado hubiera tenido que rendir desde el primer momento, producir para el equipo, y adaptarse a una liga y cultura desconocidas para él. En este actual Estudiantes parte como una referencia en absoluto principal, por detrás de los Granger, English, Kirksay o Gabriel. Situación ideal para ir creciendo poco a poco dentro de nuestra liga. El sábado fue el mejor. 

Acompañando a los colegiales en la jornada sabatina nos encontramos al auténtico equipo revelación de la temporada hasta el momento. El Obradoiro Blusens Mombus supera todas las expectativas, y con su fácil victoria ante el débil Cajasol se sitúa con un idílico balance 4-1 que cualquier aficionado compostelano hubiera firmado al comienzo de la liga. Como cantaba Antón Reixa con sus Resentidos, "Galicia Canibal", ahora que se estrena la, nada menos que primera película española de animación rodada con la entrañable y rayharrihauseniana técnica del "stop motion", "O apostolo", Galicia y Santiago de Compostela están más de moda que nunca. Volviendo al basket, los gallegos se basan en un triángulo muy claro, con el portorriqueño Andrés Rodriguez dirigiendo con clarividencia, el alero tirador Alberto Corbacho como peligro exterior, y la calidad y lustre de Levon Kendall dentro de la zona. Buenos recambios en el puesto de base con el, a menudo alocado, Rafa Freire y el sobrio Jorge Sanz y muy buenos complementos para Kendall por dentro con el tunecino Mejri y el veterano Junyent jugando con la intensidad de un veinteañero. Aún así no son muchos mimbres, por eso hay que reconocer el mérito gallego y las manos maestras y casi artesanas en el banquillo de Moncho Fernández, otro de esos entrenadores sin nombre, sin perfil alto, sin palmarés, sin títulos, pero con un trabajo brutal. Ya saben que yo incido mucho con el tema de los entrenadores, y es que me siguen pareciendo las figuras peor tratadas de todo este tinglado. Ahí están los casos de Joan Plaza, Pablo Laso, o Sergio Scariolo en la selección española. Técnicos a los que se les ningunea desde ciertos foros y medios, cuando ganan, es porque tienen una flor en el culo o una serie de jugadores capaces de jugar sin entrenador. Cuando pierden, es que son unos inútiles y toda la culpa es suya por lo que debieran verse desposeídos del carnet de entrenador de baloncesto. Sigue habiendo una gran cantidad de aficionados que, tengo que escribirlo, no se enteran de nada. Sólo les importa el "nombre", nunca el "hombre", y son incapaces de ver más allá de unos Messina u Obradovic, técnicos ganadores quienes por otro lado siempre o casi siempre han contado con plantillas multimillonarias (recuerden aquel Panathinaikos que contaba con nada menos que 15 estrellas, al estilo de una franquicia NBA, y 3 jugadores tenían que quedarse fuera de cada partido), y quienes por otro lado su obsesión por ganar les ha llevado a descuidar cierto gusto estético por el juego y trabajo en la formación de jugadores (cosa que en los primeros años de su carrera no pasaba) Personalmente, y bajo mi manera de entender este deporte, considero a Dusko Vujosevic un entrenador tan brillante casi como los citados Messina u Obradovic, su trabajo está ahí, trabajo que hay que juzgar "con lo que tiene"... repito, miren el "hombre" y no el "nombre". Volviendo al Blusens Monbus, el gallego Moncho Fernández pertenece a esa estirpe de técnicos anónimos para el aficionado medio, pero cuya labor, como dije antes, parece casi artesanal a la hora de sacar un extraordinario rendimiento a uno de los presupuestos más bajos y una de las plantillas menos brillantes en lo individual de toda la liga. Bravo, chapeau por él y por su trabajo. 

También en sábado el Bilbao Basket de otro técnico peculiar (ese look-a-like de Elvis Costello que es Fotsis Katsikaris) obtenía su cuarta victoria consecutiva y se enganchaba al pelotón de perseguidores. Lo hacía en la cancha de un Blancos de Rueda Valladolid que tras un comienzo de temporada absolutamente brillante poco a poco se va desinflando, o en su caso habría que decir "normalizando", ya que hablamos del presupuesto más exiguo de toda la liga y parece lógico que uno de los grandes de nuestro actual basket como es el Bilbao se lleva la victoria de su pabellón. Los pucelanos comienzan a mirar el pozo de la clasificación con un balance de 2-4, y aún así a mí me parece que su campeonato hasta el momento es irreprochable. Contra los de Katsikaris ofrecieron lucha en todo momento, y pese a estar por detrás en el marcador desde el primer minuto, en ningún caso se descolgaron del partido y no dejaron que las diferencias se fueran por encima de los diez puntos, teniendo ciertas opciones hasta el final. El caliente tirador griego Vasileiadis estuvo en modo "killer" todo el partido, para amargar la tarde a los de Roberto González.    



Fotsis Costello, my aim is true.


Entre los perseguidores también se encuentra un cada vez más entonado Regal Barcelona que aplastó sin piedad al colista CB Canarias. Buenas noticias y gran jornada para los culés, no tanto por la tercera victoria consecutiva en Liga, que era absolutamente previsible, si no por el hecho de alcanzar los tres dígitos en su marcador, cosa que no recordaban casi ni los más viejos del lugar, y sobre todo por el partido de su santo y seña Juan Carlos Navarro, quien ha sido el primero en reconocer que le hacía falta un partido así tras un comienzo de temporada tan dubitativo. Otros que van disipando dudas son los verdes del Unicaja de Jasmin Repesa, equipo que ya no sólo vence, si no que además empieza a convencer. Era cuestión de tiempo. Lo cierto es que los jugones exteriores del plantel malagueño (Calloway, Williams, Dragic) están cada vez más entonados y parecen más decisivos. Sobre jugadores como Urtasun o Jiménez no debiera haber dudas, y en sus interiores, aunque no brillan especialmente en ataque, si que ofrecen un grandísimo trabajo defensivo y reboteador. Consecuencia de todo ello es que el Unicaja es otro de los equipos que hay que tener en cuenta para esta temporada. No les descarten para la consecución de ninguna empresa. 

Se hacen fuertes en casa, cada uno a su manera, Fiatc Joventut y Herbalife Gran Canaria, y ambos ante dos equipos cuyo comienzo de temporada no ha sido nada malo como son UCAM Murcia y Cai Zaragoza respectivamente. Los verdinegros fieles a su tradición de equipo dinámico, vistoso y con sus jóvenes valores aportando (Nacho Llovet el mejor con 24 de valoración), los canarios, como suele ser habitual en ellos siendo fuertes atrás y dejando a su rival por debajo de los 60 puntos. Ryan Toolson comienza a afinar la muñeca. Y por último, el Fuenlabrada por fin consigue estrenar su casillero de victorias, a costa de un preocupante Lagun Aro. Leo Mainoldi ofició de viejo guerrero para dar el primer triunfo a su equipo y convertirse en el MVP de la jornada, y Gladyr por fin empieza a aparecer como la referencia anotadora que esperaban en el sur de Madrid. Por parte donostiarra y por buscar una buena noticia, gran parte del joven Dani Diez, quien debe ser el mejor tres español en un futuro no demasiado lejano y quien, como madridista confeso que soy, espero que el club blanco repesque y no sea otro de esos brillantes jugadores (Pablo Aguilar, por poner un ejemplo actual y conocido por todos) a los que vemos hacer carrera fuera de nuestro club. 

Con este panorama, ciertamente creo que estamos ante una Liga de mucha calidad y enormes y fuertes emociones. Real Madrid y Barcelona siguen pareciendo un peldaño por encima del resto (y sobre todo y ciñéndonos a los datos y resultados, el equipo de Laso se muestra como el más rocoso y difícil de batir), pero no resulta nada descabellado con contar con Valencia, Unicaja, Caja Laboral y hasta Bilbao Basket como justos aspirantes a nuestros dos títulos domésticos (Copa y Liga), al lado de estos seis grandes, invitados inesperados como Estudiantes y Blusens que veremos cuanto son capaces de aguantar en los puestos altos de la tabla. Históricos como el Joventut o el Gran Canaria no quieren quedarse atrás y seguirán peleando por buscar algún puesto para la Copa. Tampoco podemos perder de vista la pelea por abajo, con equipos como Lagun Aro,  Manresa, Fuenlabrada o Cajasol poco habituales en las quinielas del descenso, y recién ascendidos como el CB Canarias buscando despegar en cualquier momento y salir de unas posiciones a las que en cualquier momento pueden caer los Blancos de Rueda, Cai o Murcia por muy bien que hayan empezado la temporada. En definitiva, una Liga apasionante.

EL QUINTETO DE LA JORNADA


Albert Oliver (Fiatc Joventut)14 puntos y 6 asistencias. 22 valoración.
Juan Carlos Navarro (Regal Barcelona) 21 puntos y 8 asistencias. 28 valoración.
Alberto Corbacho (Blusens Monbus) 20 puntos (6/9 triples) y 4 rebs. 23 valor.
Leo Mainoldi (Fuenlabrada) 17 ptos, 15 rebs y 4 asists. 32 valoración.
Ante Tomic (Regal Barcelona) 19 ptos, 7 rebs y 2 taps. 27 valoración.     

ENTRENADOR 

Moncho Fernández (Blusens Monbus)

EL QUINTETO DE LA TEMPORADA    


Albert Oliver (Fiatc Joventut) 12.6 ptos y 4.4 asists. 16.2 valoración

Pau Ribas (Valencia Basket) 13.2 ptos, 2.4 asists, 3 rebs. 13.8 valor.
Tariq Kirksay (Asefa Estudiantes) 13.2 ptos, 7.2 rebs, 2.6 asists. 19.2 val.
Nikola Mirotic (Real Madrid) 16.4 ptos, 6.8 rebs. 21.4 valoración.
Levon Kendall (Blusens Monbus) 16.2 ptos, 6.4 rebs, 2 asists, 1.4 taps, 19.8 val.

ENTRENADOR 

Moncho Fernández (Blusens Monbus)  





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