lunes, 7 de septiembre de 2015

UNA ESPAÑA DE CONTRASTES



Pau ya manda en el Eurobasket



Dos partidos, dos extremos, dos polos opuestos. Tanta es la diferencia de lo visto en nuestro partido de debut contra Serbia frente a lo de Turquía, que no queda otro remedio que acudir al tópico de que ni éramos tan malos el sábado ni tan buenos el domingo. La realidad estará en un término medio, e incluso debemos admitir que más cercana a la de la derrota contra Serbia. No queremos con esto ser pesimistas, si no recordar que tanto Francia como Serbia son hoy por hoy dos selecciones superiores a la nuestra, más conjuntadas, en un mejor momento, y sin tantos problemas a la hora de conformar su roster definitivo para este torneo.   


Scariolo incidió después de la derrota frente a los de Djordjevic en la nefasta serie del tiro desde el triple (tampoco estuvimos bien en tiros de 2, con 20 de 46) En efecto, el 3 de 19 desde el 6.75 resultó una losa evidente para sepultar nuestras esperanzas ante los serbios. Sólo Pau Ribas (jugador español cuyo rol más ha crecido en este comienzo de campeonato) acertó a encestar desde la larga distancia con tres logros de sus cinco intentos. Entre Rudy, Llull, Mirotic y el Chacho Rodríguez sumaron un lamentable 0 de 14. ¿Anecdótico o sintomático? Pienso que lo segundo. Nuestro gran hándicap para este torneo es el tiro (que no juego) exterior. No tenemos tiradores puros, especialistas, por mucho que nuestros bases y aleros, evidentemente, puedan anotar desde el 6.75, como sucedió ante Turquía cuando firmamos un excelente 12 de 21, pero lo cierto es que ante equipos capaces de morder más por fuera (caso de Serbia), adolecemos de ese tirador frío e implacable capaz de desatascar nuestro ataque cuando más apagadas tengamos las luces. Y en el baloncesto actual no disponer de la capacidad de sumar de tres en tres se paga muy caro, sobre todo cuando tienes delante a rivales como la Serbia de Bjelica y Bogdanovic (sobre todo el primero, especializándose como “clutch player” al anotar ayer la canasta decisiva también frente a Alemania), quienes sentenciaron con sus triples el partido cuando parecíamos tener opciones gracias a que, por fin, comenzaba a aparecer un Pau Gasol desacertado frente al aro durante los tres primeros cuartos del partido (pero imperial en defensa durante todo el encuentro) También los triples, de Nedovic en este caso, sirvieron para que los serbios volteasen el partido en un segundo cuarto en el que España llegaba al bonus de personales sin haber cumplido siquiera dos minutos (¿alguien duda sobre qué pretendía Djordjevic provocando una técnica al finalizar el primer parcial?) Serbia fue superior en prácticamente todos los aspectos del juego, incluyendo en este caso los emocionales (que en otras ocasiones tan bien sabemos manejar, no puede ser de otro modo cuando hablamos de jugadores que lo han ganado todo) y con una constante presión sobre el trío arbitral por parte de su entrenador y su prolongación en la pista, Milos Teodosic, y el haber llegado al final del partido con opciones de victoria sí que permite una lectura positiva sobre el partido. No estamos tan lejos, y en una hipotética, quien sabe, semifinal, sabemos que podemos ganarles si por fuera Pau Gasol y Felipe Reyes (colosal durante los minutos que estuvo en pista) reciben algo de ayuda. Los 10 puntos de diferencia finales parecen demasiado castigo, sobre todo en un grupo en el que los averages pueden cobrar tanta importancia… de ahí que el botín de 27 puntos ante Turquía (por cierto, 191 puntos encajados en sus dos primeros partidos, parece que ahí tienen un problema) sea tan suculento y arregle tanto la derrota contra Serbia. No hay que restarle ningún mérito al partido ante los turcos, una selección siempre difícil, entre las diez mejores del continente (y que quizás no se clasifiquen para octavos, pero únicamente por la dureza del grupo B, aunque su victoria ante Italia, una Italia que sufrió horrores ante la débil Islandia para ganar y no verse con pie y medio fuera, les da bastantes opciones), y que en 2009 nos ganó en el primer partido de la segunda fase, tras la ya famosa última jugada de un bisoño Sergio Llull que recibió falta personal no señalada, provocando las polémicas declaraciones de Marc Gasol sobre “el chico nuevo” que parecían anunciar un catastrófico cisma dentro de la selección y que, al contrario, fueron el punto de partida para una reacción que nos llevó a ganar el oro después de cinco partidos consecutivos soberbios. La importancia del partido ante Turquía se ve realzada si tenemos en cuenta que somos el único equipo que ha logrado pasar del centenar de puntos en un partido (aunque insistimos en la endeblez de la defensa otomana)  


En definitiva, es un buen comienzo el de este fin de semana en el Eurobasket 2015 para nuestra selección. Serbia era el rival más complicado del grupo y contra quien mayores posibilidades había de derrota, como así ha sido. En una primera fase tan exigente no hay demasiado margen de error, pero también es cierto que es muy difícil que algún equipo acabe invicto. Quizás lo consiga Serbia, pero ayer estuvo a punto de morder el polvo ante una selección en principio inferior pero igualmente complicada como Alemania. Por cierto, parece que por fin Siro López ya ha sabido quien es Robin Benzig, ahora que ha fichado por el Cai Zaragoza, después de que hace cuatro años, en el Eurobasket 2011 y en plena campaña de intoxicación contra nuestro seleccionador, despreciaba por la noche en la radio nuestra victoria ante la Alemania de Nowitzki conseguida durante el día y retransmitida televisivamente por él mismo, afirmando que la selección alemana estaba plagada de jugadores de segunda división y rebuznando en concreto a las ondas un lamentable “¿quién rayos es ese Robin Benzig?” Benzig por aquel entonces tenía 22 años y era una de las grandes promesas del baloncesto germano, había sonado como drafteable NBA y al poco se rumoreó un posible interés del Real Madrid en su contratación. Finalmente, como tantos otros, se quedó en eso, una eterna promesa, pero aun así un buen jugador y que posiblemente lo hará muy bien en la capital maña. Esto es lo que pasa cuando pones a un futbolero, y de los malos, a hacer baloncesto. La verdad es que el tema de los comentaristas televisivos para este torneo es para tratarlo aparte, y va a dar que hablar. Lo de Antúnez es sencillamente estrambótico, y en el primer partido comentado (Alemania-Islandia), ya nos dejó perlas como que Tim Hardaway Jr. era el base titular de Atlanta Hawks o que Nowitzki había sido 13 temporadas MVP de la NBA. Da la sensación de que deprisa y corriendo y a última hora se ha empapado de una serie de datos para ir de enterado con el micrófono, pero no ha estado siguiendo realmente el baloncesto más allá de una manera superficial, ¿es posible que no haya visto un partido de Atlanta en toda la temporada, cuándo ha sido uno de los mejores equipos del pasado curso NBA y que mejor baloncesto ha realizado?.Al final se embolinga y hace una ensalada con esos mismos datos sin orden ni concierto. Una pena. 


Volviendo a la selección, creemos que iremos a más. Una mejoría que deberá ir pareja a la de algunos jugadores, caso de Mirotic, que irá creciendo según avance el torneo. Esperemos que jóvenes como Vives o Willy vayan teniendo minutos también y soltándose cada vez más. Ribas no ha esperado para coger galones, demostrando la absoluta justicia de su convocatoria y su gran momento de forma deportivo. Hay muchos aspectos a mejorar, morder más en defensa para tener más opciones de correr. Mejorar la selección de tiro, templar los ánimos de jugadores como el Chacho, Llull o Rudy, acostumbrados a llegar y tirar en el Madrid de Laso, pero que aquí quizás deban madurar más los ataques. En el aspecto individual, Pau Gasol nos lidera, como era de esperar, con sus 18.5, 6 rebotes y 3 tapones por partido. Felipe Reyes, en 20 minutos por partido ha promediado 12.5 puntos y 3.5 rebotes por partido, pero destacando sobre todo su 61% en tiros de campo. Pau Ribas es nuestro mejor tirador, con sus 5 triples de 9 intentos, y Llull, muy desacertado de cara al aro (25% en tiros de campo), lo compensa a la hora de repartir juego (5.5 asistencias por partido) Por cierto que es el jugador que más minutos ha estado en pista en estos dos primeros partidos (27.5 minutos) 



Hoy toca descanso, y mañana otra importante piedra de toque y que en caso de derrota nos vuelve complicar nuestras opciones de, al menos acabar entre los tres primeros y evitar así a Francia en octavos de final. Una Italia cuyo comienzo de torneo no está siendo todo lo bueno que las previsiones le daban.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario